Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 164

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 167

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 170

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 173

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 176

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 178

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 180

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 202

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 206

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 224

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 225

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 227

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 321

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 321

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 321

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/includes/class.layout.php on line 321

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/admin/class.options.metapanel.php on line 56

Warning: Creating default object from empty value in /home/gssn/public_html/ipsorg/blog/esp/wp-content/themes/platform/admin/class.options.metapanel.php on line 49
¿Se puede negociar la batalla decisiva por la Amazonia? | IPS en la blogosfera

SÃO PAULO, ago (IPS) Todo indica que en la cuenca del brasileño río Tapajós se peleará la batalla decisiva entre aprovechamiento hidroeléctrico y preservación de la Amazonia. Allí están en juego un potencial de casi 30.000 megavatios (MW) y una parte vital del bioma amazónico.

De las 42 centrales posibles en esa cuenca, ocho figuran en el plan gubernamental de expansión energética hasta 2021.

Uno de los principales tributarios del río Amazonas, en el noreste de Brasil, el Tapajós y sus afluentes conforman una región poco ocupada –solo un millón de habitantes en 50 millones de hectáreas— respecto de otros sitios en los que se construyen hidroeléctricas, como la de Belo Monte, en el río Xingú.

Por eso el gobierno promete construirlas allí como se extrae petróleo en alta mar: sin acceso terrestre, transportando personal, equipos y materiales por vía área y reforestando después el terreno de los canteros.

Pero tales plataformas no disuaden al pueblo indígena mundurukú de luchar contra las represas en la Amazonia.

Además, hay mucho oro y por tanto “garimpeiros” (buscadores de ese metal) en la cuenca del Tapajós, cuya hidrovía, si es implantada, constituirá la mejor ruta de transporte agrícola desde el estado occidental de Mato Grosso, el mayor productor de soja en Brasil.

Según la filial del Fondo Mundial para la Naturaleza en este país (WWF-Brasil), preservar un gran bloque y otras áreas de la cuenca, dejando libre el río Jamanxim, uno de los grandes afluentes del Tapajós, es la condición para conservar ecosistemas y especies indispensables.

WWF desarrolló una metodología para definir áreas ambientales prioritarias, un Sistema de Soporte a las Decisiones que, aplicado a la cuenca del Tapajós, puede servir de base para negociaciones que superen los antagonismos y conduzcan a mejores decisiones sobre las hidroeléctricas.

Es lo que explica Pedro Bara, líder de Estrategia de Infraestructura de la Iniciativa Amazonia Viva de WWF, en la segunda parte de esta entrevista con IPS.

IPS: Ustedes proponen conservar 30 por ciento de cada uno de los 423 ecosistemas terrestres y 299 acuáticos identificados en la Amazonia, como base para negociar la expansión hidroeléctrica sin pérdidas irrecuperables para el bioma. ¿Cómo se aplica eso al Tapajós?

PEDRO BARA: En la Amazonia, dado el poco conocimiento de toda su biodiversidad, hacemos una aproximación. En el caso del Tapajós pudimos detallar un  “arca de Noé”, con 93 ecosistemas terrestres y 28 acuáticos, 46 especies de aves, 17 de mamíferos y 37 de peces, además de 20 hábitat acuáticos, definidos por expertos reconocidos mundialmente.

También se analizó el uso del suelo, el avance de la agropecuaria y del “garimpo”, y se concluyó que 22 por ciento del territorio ya está degradado. Pero las áreas protegidas cubren también 22 por ciento y las tierras indígenas 20 por ciento.

Se llegó a detalles de especies, incluyendo las endémicas, de hábitat y de áreas insustituibles. La evaluación contempla el tamaño de la represa, las unidades de conservación integral o de uso sustentable y las tierras indígenas. Como hay reservas por demarcar, el escenario va cambiando.

IPS: ¿Y a que conclusiones se llegó con el empleo de la herramienta y los datos recogidos?

PB: Lo que pretendemos es conservar como mínimo este gran bloque central (Bara muestra en un mapa un área alrededor de la confluencia de los ríos Juruena y Teles Pires, donde nace el Tapajós y donde se prevén por lo menos cuatro hidroeléctricas).

El bloque central de la cuenca del río Tapajós, cuya conservación es vital. Los triángulos negros indican las centrales hidroeléctricas planificadas. Los colores celeste y azul indican el tamaño de los embalses. Crédito: Cortesía WWF

El bloque central de la cuenca del río Tapajós, cuya conservación es vital. Los triángulos negros indican las centrales hidroeléctricas planificadas. Los colores celeste y azul indican el tamaño de los embalses. Crédito: Cortesía WWF

Las otras áreas seleccionadas están marcadas por esas manchas verdes. Algunas centrales son inaceptables, como Chacorão (en el alto Tapajós, y con una capacidad de 3.336 MW). Queda dentro de la tierra indígena Mundurukú.

IPS: Pero el gobierno afirma que no inundará ningún territorio indígena.

PB: Es porque no plantea el proyecto en la mesa, no lo incluyó en el Plan Decenal de Expansión de Energía, pues teme reacciones. Pero los mundurukús están conscientes de eso, por eso están reaccionando.

IPS: ¿Que otras plantas son rechazadas por los criterios del modelo de la WWF?

PB: La de Escondido, inclusive porque inundará cerca de 1.000 kilómetros cuadrados, para generar 1.248 MW. Es el doble del embalse de Belo Monte, que tendrá una capacidad de generación casi 10 veces mayor.

De todos los proyectos, Escondido es el peor en términos de relación entre represa y generación.

Entre esas dos están Salto Augusto (1.461 MW) y São Simão (3.509 MW), también problemáticas por ubicarse en el Parque Nacional de Juruena. Las cuatro están dentro del gran bloque central a conservar.

IPS: ¿Pero el gobierno aceptaría negociar São Luiz do Tapajós (6.133 MW), que es estratégica?

PB:  No, la Empresa de Pesquisa Energética (EPE), ya dejó claro que, aunque considere excelente nuestra herramienta, no negociaría São Luiz ni Jatobá (2.338 MW), aunque fuesen rechazadas por nuestros análisis. Con estas y algunas otras de menor impacto, se puede alcanzar la mitad del potencial de la cuenca sin comprometer la diversidad biológica y cultural del gran bloque central. Hay espacio para negociar.

IPS: El presidente de la EPE, Mauricio Tolmasquim, declaró su adhesión al uso de la herramienta para  “preservar lo máximo posible” en el programa hidroeléctrico. ¿Hay señales de que el gobierno está dispuesto a negociar?

PB: Faltan elementos importantes para que la EPE preserve lo máximo posible mirando la cuenca del Tapajós como un todo. Principalmente porque no todos los permisos ambientales están en la jurisdicción federal y, sin articulación entre los estados y la Unión, eso termina generando decisiones conflictivas.

Por ejemplo, el caso de la hidroeléctrica Paiguá que recientemente obtuvo licencia preliminar del estado de Mato Grosso. Esa central represaría el río Sangue, que se cree desempeña un papel importante para especies migratorias de peces (las de mayor valor comercial).

Para entender mejor las rutas migratorias en esa cuenca, la EPE contrató en 2012 un amplio estudio. Si de aquí a dos años, cuando el estudio esté concluido, se confirma la relevancia del Sangue como ruta migratoria, tal información perderá validez si el río es bloqueado por la represa.

Soy menos optimista respecto de que el gobierno negocie un programa hidroeléctrico en Tapajós, creo que todavía prefiere una batalla por vez, aunque sea acumulando desgastes.

Pero una batalla por vez, sin saber hasta dónde se va, no contribuye a la vida de aquellos que dependen de ríos libres y de la conservación de áreas críticas como el bloque central de la cuenca del Tapajós. Por otro lado, hemos observado que un debate amplio y estratégico despierta cada vez más interés de empresas y financiadores.

IPS: Pero los indígenas, especialmente los mundurukús, quieren vetar las represas. ¿Le parece posible convencerlos de negociar?

PB: Estamos en proceso de acercamiento con los líderes indígenas. Son muchas aldeas, algunas muy distantes entre sí, y existe un enorme desafío planteado al pueblo mundurukú en cuanto a cómo organizarse frente a un gran proyecto que afecta su territorio y que mueve grandes intereses.

Ellos tienen que informarse, comunicar, crear espacios participativos, deliberar. Creo que en el caso de Chacorão un acuerdo es difícil porque muchas aldeas serán afectadas. En los demás creo que dependerá de otras etnias y, obviamente, de la buena voluntad de los interlocutores del gobierno en aceptar un diálogo que comienza por la aplicación de la Convención 169 de la Organización Internacional del Trabajo, sobre consentimiento previo e informado de las comunidades, pero que va mucho más allá de la cuestión del territorio y de las hidroeléctricas.

IPS: ¿No ayudaría tener planes de desarrollo consistentes para el territorio afectado?

PB: Pero es necesario que se realicen mucho antes de las obras, no como en Belo Monte, que ya tiene 30 por ciento de avance y el plan de desarrollo apenas comenzó, con acciones de salud, educación, saneamiento y seguridad, que caminan más lentamente que la construcción de la central.

Todos pierden en guerra por las hidroeléctricas amazónicas – Parte I

Hidroeléctrica de Belo Monte también bajo fuego amigo – 2012

Hidroeléctrica inundará santuario indígena en Amazonia – 2012

Río Xingú entre la electricidad y la diversidad – 2010

Belo Monte, la tercera invasión del río Xingú – 2010

Tagged with: